UNA FORMA DE TECNOLOGÍA ALTERNATIVA Y MÁS HUMANA ES POSIBLE
Cuando quienes hemos tenido la oportunidad de hacer investigación dentro del ambiente académico, y el empresarial, nos percatamos que lo académico apunta resolver cosas tal vez demasiado complejas; que poca o nula utilidad social pueden aportar, y su objetivo es en muchas ocasiones cumplir con un requisito para obtener un título o un reconocimiento individual.
En el mundo empresarial, resulta más de lo mismo, ya que el objetivo es producto de un afán competitivo, comercial y tecnológico que ha perdido de foco, llevando el ámbito científico al campo comercial y de forma progresiva la ciencia se ha ido alejando cada vez más de los asuntos que conciernen a la realidad de los ciudadanos.
Vemos como la ciencia y la tecnología afianzan las relaciones de poder existentes, olvidando su objetivo de ayuda al progreso de la sociedad. Avances tecnológicos cada vez más pensados en el aumento de la producción y en la minimización del coste económico, si considerar sus externalidades; aquellas que afectan a las personas que pierden en ese equivocado afán por alcanzar la eficiencia.
El precio a pagar por las soluciones tecnológicas ya no solo lleva implícito el deterioro causado al entorno, sino el costo social que de estas tecnologías se deriva, haciendo que los costes sociales, psicológicos y físicos de los avances científicos y tecnológicos sean cada vez más altos.
Hoy debemos pararnos a pensar en la forma de sacar el máximo provecho de los avances tecnológicos, pero con un objetivo diferente al de crecimiento económico basado en la competitividad y la eficiencia.
Existen formas de tecnología alternativas más congruentes con la sociedad que la pueden hacer más justa, democrática y más integrada con la naturaleza. Formas de tecnología que apunten a la aplicación de sus avances en pro de la sociedad y no del sistema económico y lo que es más importante fijándose en que la solución aportada no genere una nuevo problema.
Formas de tecnología que se puedan controlar localmente e impliquen en su desarrollo a los usuarios finales, que involucren a todos y cada uno de los componentes de la cadena de producción y consumo, para que el producto sea el resultado de un proceso de diseño participativo e integral.
Que utilicen recursos y habilidades locales, resultando ser mucho más humanas y por ende más acoplados a la naturaleza de la cual somos parte integral.
Formas de tecnologías que sean más ecológicas, de bajo coste y realmente sostenibles. Pensadas para satisfacer necesidades básicas que permitan favorecer el tiempo libre para generar más integración social y por ende más crecimiento personal a través del aprovechamiento del tiempo que nos proporciona la automatización de procesos por ejemplo.
Una tecnología con una visión holística y eco sistémica que se fije en la naturaleza para beneficiar a la sociedad. Que sume y o reste a la comunidad, que permita el uso y disfrute de las cosas sencillas como resultado de la solución inteligente las cosas complejas.
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